La rebeldía en un proceso judicial se refiere a la situación en la que el demandado no asiste al procedimiento judicial después de haber sido formalmente notificado y emplazado por el juez.
La situación del llamado rebelde está contemplada en la ley.
Tal hecho, no se considera como allanamiento (aceptación voluntaria por parte del demandado de lo que se le está solicitando en la demanda de la parte contraria) ni como admisión de los hechos de la demanda.
Asimismo, el demandante aún debe probar los hechos constitutivos de su pretensión.
Los efectos principales de la rebeldía son:
- Que no se realizan otras notificaciones al demandado rebelde, excepto la resolución que ponga fin al proceso.
- Se pierde la oportunidad de realizar los actos propios de las garantías de defensa hasta que el demandado comparezca en el procedimiento.
¿Qué derechos tiene entonces el rebelde?
Dependiendo del procedimiento. En el procedimiento ordinario, el demandado rebelde que comparece antes de la audiencia previa puede proponer pruebas para desvirtuar los hechos del actor. Teniendo siempre en cuenta que el demandado rebelde se puede personar en cualquier estado del pleito, nada en la ley se lo impide.
En el juicio verbal, si el demandado rebelde comparece después del plazo de diez días para contestar a la demanda, el derecho a proponer prueba queda en manos del actor, el juez o los codemandados.
Aunque en general. si el demandado se persona cuando todavía puede proponer prueba, podrá hacerlo de aquella que sirva para desestimar las alegaciones de la parte actora por inexactitud de los hechos constitutivos, pero no podrá probar hechos impeditivos o extintivos no alegados.
Además, hay ciertos recursos disponibles para el rebelde:
- El rebelde puede instar la nulidad de actuaciones si no compareció debido a un emplazamiento incorrecto;
- También puede solicitar la rescisión de la sentencia firme mediante la audiencia al rebelde si la incomparecencia fue involuntaria.
En definitiva, la rebeldía procesal supone la ausencia del demandado en algunos actos o la integridad del procedimiento judicial, no eximiendo esto al demandante de su carga de la prueba, y teniendo a su vez el rebelde ciertos derechos y recursos disponibles a su alcance.
Si desea plantear alguna cuestión adicional acerca del estado de rebeldía, no dude en contactar con Lex Foris International Law.
Rafael Montes Velástegui