Que es un procurador de los tribunales en españa?

21 / Feb

Hemos observado la extrañeza ante la figura del procurador que suscita en nuestros clientes. Por ello, desde Lex Foris quisiéramos hacerles una explicación somera de qué es esta figura, para qué sirven sus servicios profesionales y los requisitos que tiene que cumplir un procurador.

Un procurador de los Tribunales es un licenciado en Derecho especialista en Derecho Procesal, a diferencia del abogado, que lleva la dirección del proceso, cuya función primordial es la representación de las personas ante los Tribunales, garantizando la impulsión del procedimiento por sus trámites y en general, todas aquellas cuestiones de procedimiento que no sean de estricta defensa, que como acabo de indicar, es función del abogado.

Como observación diremos que el abogado también debe ser un especialista en derecho procesal pero este profesional estudia y redacta los escritos al ser especialista en el fondo de la controversia, mientras que el procurador se encarga de procesal propiamente dicho, esto es, control de plazos, modos de recurrir, etc.

Otra función del Procurador es representar al litigante ante los Juzgados y Tribunales. Es una función importante desde el momento en el que los juzgados y tribunales, en vez de notificar las resoluciones al propio ciudadano, lo realiza al procurador y éste se encarga de hacérselo llegar al abogado para que decida qué paso seguir tras la notificación de una resolución (como por ejemplo, apelar). Esta función también está establecida por ley. La Ley de Enjuiciamiento Civil española dispone en su artículo 23: “La comparecencia en juicio será por medio de procurador legalmente habilitado para actuar en el tribunal que conozca del juicio“.

Nuestra legislación civil exige se representado en juicio por procurador de los tribunales y asistidos por abogado a partir de los 2000 euros de cuantía de la reclamación, por debajo de esas cantidades no es necesaria tal representación.

La figura del Procurador es desconocida en otros países y por ello siempre cuestionada. Pero lejos de ello, además de ser el representante del cliente y el especialista en derecho, el procurador tiene el deber de tener conocimientos avanzados en la aplicación de la tecnología en la administración de justicia.

En cuanto a la etimología de la palabra «procurador», ésta viene del latín “procurator” y significa «el que proporciona una cosa necesaria, el que cuida el negocio, el que representa alguien legalmente». Debe destacarse dicha etimología por su importancia al denominado procurador de la ciudad “representante de la misma en todas las cuestiones judiciales, civiles o criminales, en las que ésta debiese intervenir como parte demandante o demandada”. Su primera reglamentación se remonta al Siglo XIV y la elección del mismo recaía en un notario que fuese buen conocedor de la disciplina procesal.

Finalmente, indicarles que como profesional que es, el procurador cobra por sus servicios profesionales de manera independiente a los abogados de Lex Foris y por ello ha de tenerse en cuenta este gasto extraordinario a la hora de tener en cuenta qué costes y gastos puede acarrear un posible juicio. La buena noticia es que si gana el juicio, los gastos de procurador se consideran como costas del proceso y podrían ser abonadas por la parte contraria, dependiendo de lo que indique la Sentencia.

Mª Dolores García Santos